martes, 11 de septiembre de 2012

Nuevo capítulo tras una larga ausencia.

¡Buenas noches!

Pues hoy por fin os traigo el siguiente capítulo de la serie, no es muy largo y como veis es muy sencillo, pero tanto esta parte como la siguiente cuenta bastante cosas sobre el nuevo rumbo que está tomando la vida de Alidaen dentro de la compañía. Estos últimos capítulos son menos intensos que los anteriores pero ya queda menos para llegar al final de la temporada, y ya iréis viendo como las cosas se van poniendo calentitas a medida que nos acerquemos. Espero que a pesar de todo os siga gustando la serie y estéis atentos a los próximos capítulos!

Aparte de esto aviso de que muy pronto habrá una sorpresa en la trama que espero que sea de vuestro agrado, aparte de otras que ya se irán viendo que bueno...no serán tan buenas (lo siento...llevo mucho sin ser malvada ò.ó)

Y bueno, también comentar que en este capítulo he aprovechado para nombrar un mundo totalmente creado por una jugadora muy querida para mí y que podréis encontrar si queréis en su pedazo de blog: Birgitte's Place. Se llama Thai-Rihndab y es una verdadera pasada, la verdad es que es increíble la de maravillas que crean los propios jugadores, hay mundos, objetos, ropas y demás que les dan mil patadas a los originales. En fin guapa, muchas gracias por compartirlo y dejarme introducirlo en la historia ;)

Un beso enorme a todos y como siempre muchísimas gracias por leer y comentar, cada día comentario vuestro me saca una gran sonrisa y me ayuda a seguir este pequeño proyecto con ganas y mucha ilusión.

¡Cuidaos y nos vemos en el siguiente capítulo!

Capítulo XIX: La Musa I

(PRIMERA PARTE)

(Bridgeport - 6 Febrero 2011)

Había pasado casi un mes desde la fiesta y el incidente con aquel…elemento, pero por suerte no había vuelto a recibir ninguna visita. Ni suya ni de ningún vampiro.

Las clases con los pequeños empezaron esa misma semana y enseguida me amoldé a su incansable ritmo. Como ya me conocían no fue difícil ganarme su confianza, y todos los lunes, miércoles y jueves hacíamos talleres de cuentos, manualidades y música, donde yo les daba clases y cuidaba de ellos un par de horas cada día.
 Siempre estaban pidiéndome algo nuevo, y gracias en parte a mi imaginación y las innumerables tardes leyendo con mi abuela pude saciar su curiosidad con fantasiosas historias que una vez mi querida Fionah me contó a mí cuando era una niña.

En aquellos momentos la echaba de menos más que nunca, y agradecía enormemente todas sus enseñanzas.

La pequeña Becca no recordaba nada del incidente con el vampiro, y parecía sumamente feliz abrazando el viejo libro que el vampiro le regaló. Sentía bastante curiosidad por saber qué era lo que encerraban sus páginas, pero cada vez que le preguntaba Becca negaba con la cabeza diciéndome que era un secreto. Y que no podía contárselo a nadie.

Pero me prometió que si sus padres le daban permiso, me lo dejaría para que yo misma le leyese lo que ponía.

Pobre pequeña…me partía el corazón verla tan sola.
 -          Vamos a hacer algo mucho mejor que eso – le contesté sentándome a su lado con una sonrisa – te voy a enseñar a leer para que tu misma puedas hacerlo.

Sus ojitos azules se abrieron de par en par, llenos de ilusión.

-          ¿De verdad?

-          Claro, y cuando te apetezca…tú me leerás lo que pone en ese libro ¿Qué te parece?

-          ¡Bieeen! – gritó lanzándose a mis brazos - ¡Eres la mejor del mundo Ali!
 Otra vez aquella sensación…esa calidez… ¿Por qué me sentía así? Algo en mí parecía pedir a gritos ese cariño tan sincero e inocente.

Pero no entendía porque. Siempre me había gustado estar en compañía de niños, pero últimamente era distinto y pensaba mucho en ello. A veces incluso me parecía oír la voz de alguien en sueños, un niño que no dejaba de repetir sin cesar “¡Estoy volando! ¡Mira como vuelo!” Pero no podía verlo, solo escucharlo…

¿Qué me estaba pasando?

Pero no sólo empecé a trabajar para los niños a partir de esa fiesta. También acepté una propuesta que me hicieron justo esa semana.

(Bridgeport - Unas semanas antes)
 Una semana después de que empezasen las clases, Ángela y Violeta me citaron en el despacho para proponerme algo que nunca hubiese esperado.

-          Queremos que cantes para la Compañía – dijeron a la vez.

-          ¿Qué?

Les miré confusa.

-          Tu voz…es perfecta para el proyecto que tenemos en mente – comentó Violeta, frotándose las manos.

-          ¿Y qué tenéis en mente…?

-          Cantarás para nosotros en nuestras obras de teatro y si todo sale bien harás tus propios recitales de música folk, aunque con un estilo propio.

-          ¡Será increíble! – continuó la Musa pelirroja – hemos pensado tu papel en el escenario, ¡Serás la voz de Shelüne, y cantarás, narrarás historias y recitarás poesía en nuestras obras como si fueses nuestro juglar!
 Violeta parecía vivirlo mientras lo contaba, tanto que casi podía verme en el escenario sujetando una mandolina y recitando poemas por doquier.

-          ¿Estáis hablando en serio? Si no tengo ni idea de cantar ni de actuar. Nunca me he puesto delante de un escenario salvo para…

-          ¡Eso no importa! – exclamó moviendo las manos como si no tuviese importancia que fuese una negada para lo que me pedían - Hemos contratado a una de nuestras mejores maestras de canto para que te enseñe personalmente. Darás clases todos los días con ellas, en principio dos horas. Después practicaras con Nadia en el teatro unas tres horas a la semana, alternando con los días de talleres con los niños. Baile y expresión corporal con Shayla y con…

-          Violeta espera… creo que la estás asustando.
 Parpadeé varias veces, sin creerme lo que escuchaba.

-          P-pero…ni siquiera sé si estoy preparada para…

-          No te preocupes Alice – me tranquilizó Ángela, – no tienes que aceptar si no es lo que deseas...para eso te hemos pedido que vengas – lanzó una miradita de reojo a Violeta, que como siempre se había emocionado y revelado el pastel antes de tiempo. – Para ver qué te parecía nuestra propuesta.

-          P-pero…ya habéis contratado…- balbuceé algo nerviosa.

Ángela fulminó a Violeta con la mirada, y ella contestó con un guiño divertido.
 -          No hay nada apalabrado – se explicó – y no tienes ningún tipo de compromiso para hacerlo si no lo deseas…

-          Pero hemos firmado un contrato por seis meses y la hemos hecho venir a ella y a su hermana desde Thai-Rihndab – interrumpió entre susurros Violeta antes de taparse la boca al ver la cara de su compañera – esto…vale…ya me callo.

-          ¿Thai-Rihndab? ¿Y eso está muy lejos? – pregunté, como ya dije alguna que otra vez la Geografía no era lo mío.

-          No mucho – dijo Violeta con la boca pequeña.

Ángela no contestó. Obviamente mentían, pues Thai-Rihndab era una pequeña isla situada ni más ni menos que ¡en el mar Simsiático! Claro que hasta que no me paré a mirarlo en Google no lo supe.

-          P-pero…
 -          ¡No hay peros que valgan! ¡Vas a triunfar! Además… ¿no decías que tenías demasiado tiempo libre? Pues ah amiga… ¡te vas a enterar de lo que es trabajar con Shelüne!

-          Violeta ¿sabes que no ayudas mucho?

-          Deja de ser condescendiente Angie, es justo lo que necesita para olvidarse de todo lo que ha pasado últimamente, estar ocupada no le va a sentar nada mal ¿a que no princesa?

-          La verdad es que…me apetece mucho trabajar con vosotros pero no sé si…

-          Nada de peros, y no te subestimes pues sé ver cuando alguien tiene el “don” – esta palabra la remarcó con un tonillo extraño, como si fuese algún tipo de poder sobrenatural.
 Ay Violeta…si supieses los dones que tenían algunos aquí…

-          E-está bien – contesté algo más convencida – lo intentaré. Haré todo lo que pueda por aprender.

-          Todo lo que puedas y más – replicó Violeta señalándome con el dedo - porque dentro de un mes participarás en tu primera obra de teatro…

-          ¡¿QUÉ?!
 -          ¡Si! Hemos pensado que el día de San Valentín será una buena fecha para estrenarla ¡¿No es genial?! ¡Vas a ser famosa!

Ambas me miraron con una sonrisita, Ángela de circunstancia y Violeta cargada de picardía.

-          Así nos aseguramos que no te duermas en los laureles…- comentó Violeta dirigiéndose hacia la puerta con aire triunfante.

La madre que las…

-          Alice ¿podemos hablar a solas? – preguntó Ángela cuando ya nos despedimos y Violeta ya había salido del despacho.
 -          ¡Ángela voy a hacer el ridículo! – exclamé abrumada tras conocer la fecha de la obra.

-          No debes preocuparte por nada, lo harás de maravilla.

-          Tenéis demasiada confianza puesta en mí, no se me da bien actuar para el público.

-          Apenas lo verás, todo estará a oscuras y sólo tendrás que hacer lo que ya vimos aquella noche.

-          ¿Quieres que duerma a todo el mundo? Si ni sé cómo lo hice…

-          Ummm… - lo pensó – no. Será mejor que no uses tus poderes.

-          ¿Y si me salen solos? ¿Y si empiezo a soltar polvos mágicos y todo el mundo se queda dormido? ¿Te imaginas los titulares? “La nueva obra de Shelüne deja catatónicos al público de Bridgeport” o “La nueva actriz era tan aburrida que durmió hasta al apuntador”
 -          Alice…tranquila – tomó mi mano con una sonrisa – lo harás bien.

-          ¿Y cómo estás tan segura?

-          Porque es algo que llevas dentro de ti aunque no lo sepas.

-          ¿Qué quieres decir?

-          Verás…he estado informándome sobre vosotras…las…ninfas.

Arqueé una ceja.

-          Los libros hablan de vosotras como seres mitológicos asociados estrechamente con la naturaleza, pero también con el arte – empezó a explicarme. - Se dice que aquel con alma de artista que veía a una ninfa, quedaba inmediatamente fascinado por ellas, sintiendo un repentino deseo de crear belleza y expresarla a través de sus obras. Sois algo así como un chute de inspiración para los artistas.
 -          ¿Chute de inspiración? – le miré confusa - ¿Y eso es bueno?

-          Pensarás que es una locura, pero es algo que noté desde el primer día que entraste a Shelüne…- me confesó - ¿Recuerdas el día que nos conociste y Giglio tocó para nosotros?

-          Si – sonreí al recordarlo.

-          Pues era la primera vez que tocaba esa canción con el chelo.

-          Giglio es muy bueno tocando el chelo, sería una casualidad que yo pasase por allí cuando se sintió inspirado.

-          Puede ser muy bueno, pero sacar de oído una canción a la primera es prácticamente imposible, requiere mucha práctica por muy bueno que seas.

-          La verdad es que parecía como si llevase toda la vida tocándola.
 -          Y no es el único caso. He notado que cuando acudes a ver algún ensayo, todo el mundo trabaja con una pasión y un empeño que antes no demostraba. Creo que puedes hacer mucho bien en nuestras obras Alice…y no sólo porque confío en que harás un gran trabajo como el día de la fiesta, sino también porque servirás de inspiración a nuestros artistas mientras estés presente en el escenario.

-          ¿De verdad crees que yo…? – pregunté sorprendida por su confianza - Al fin y al cabo son sólo leyendas.

-          Y tú eres la muestra de que las leyendas son reales. Eres una ninfa, una verdadera Musa para nosotros.

-          No sé que decir…

-          Di que estás dispuesta a trabajar y aprender con nosotros.

Asentí, bastante más convencida que antes.

-          Será un placer serviros, mi señora – contesté medio en broma con una cortés reverencia.
 -          Así me gusta, si sigues por ese camino vas a ser conocida como la mejor juglar de todo Bridgeport.

-          Eso no será difícil, no creo que hoy en día haya muchos juglares sueltos por el mundo.

Nos echamos a reír.

-          Ya querida…pero tu vienes de otro mundo. Debes convertirte en una leyenda viva, hacerles creer en la magia…

-          ¿Y para eso no sería más fácil que Nadia hiciese uno de sus…? - moví las manos como si conjurase algún hechizo.

-          Queremos que crean en la magia mientras vean nuestros espectáculos, no que tengan la certeza de que existe al terminar la obra. Es distinto.

-          Entiendo…

-          Pero vas a tener que trabajar muy duro. Apenas te quedará tiempo libre y las primeras semanas hasta que te adaptes al cambio van a ser muy duras. Te haremos un contrato a jornada completa y cobrarás desde el primer día como cualquier miembro de Shelüne. Descansarás los fines de semana más vacaciones.
 -          No puedo creerlo… ¿voy a cobrar por recibir clases?

-          Desde hoy mismo serás un miembro activo más de la Compañía, y mereces el mismo trato que los demás. Tu sueldo al principio no será gran cosa, pero puedes ganar una buena comisión con cada actuación. Dependerá de cómo trabajes y tu esfuerzo por aprender que obtengas más contratos para actuar o no.

-          Pero si la gente viene a vernos y me ve…

-          No puedes estar escondida toda la vida Alidaen, es hora de que plantes cara al mundo. Si quieren venir a por ti que lo hagan…les estaremos esperando – me miró a los ojos seriamente - y te aseguro que no se saldrán con la suya.
 Pensé en sus palabras. Aquello parecía una provocación abierta para mis enemigos. Me gustaba…

¿Vivir escondida toda mi vida o provocarles para que viniesen a por mí? Puede que fuese una estupidez, pero el peligro a veces se convertía en un bocado demasiado suculento. Y con otro nombre y otra vida no tendrían por qué relacionarme con la paleta introvertida y rara de Riverview. ¡No si me hacía pasar por una verdadera artista!

Vale…puede que fuese demasiado precipitado pensar en ello pero… ¿Por qué no intentarlo? Ya estaba harta de esconderme a esperar. Vampiros…y fantasmas del pasado…ya era hora de hacerles ver que no les tenía ningún miedo, y que si querían cazarme estaba dispuesta a patear unos cuantos traseros. Y no estaba sola.
 -          Estoy lista para empezar hoy mismo - dije finalmente.

-          Necesitarás un nombre artístico ¿se te ocurre alguno?

Llegó casi sin pensarlo. Y casi me dio por reír al recordar de donde vino…

-          Lithiel – dije.

-          Bonito nombre ¿de donde lo has sacado?

-          De un sueño – contesté sonriente.
Lithiel…

Un nombre que me llevaría a la fama y a la vez atraería a algo más que seguidores hasta las puertas de Shelüne.

(Siguiente capítulo)
(Comentario sobre este capítulo)
(Capítulo anterior)

lunes, 3 de septiembre de 2012

De vuelta y con las pilas recargadas ^^

¡Buenas tardes!

Pues eso, que ya me tenéis aquí de vuelta después de un mes desaparecida por tierras sureñas. Ahora mismo ando descargando los objetos que tenía pendientes y preparando el juego para volver a sacar las imágenes, pero en cuanto deje todo listo volveré a la carga y esta vez espero sin demasiados retrasos.

Muchas gracias a todos por vuestra paciencia y los comentarios que he ido viendo que habéis dejado entre capítulos, siempre es un placer poder leeros y saber que siguen entrando nuevos lectores, ¡si es que sois los mejores! Como siempre muchísimas gracias a todos por vuestro interés y cariño *.*

¡Un beso enorme y no vemos prontito en el siguiente capítulo!